SE LLAMA DESEO
Tiene olor a jazmín
Y pantalones de cuero
Sombrero de arlequín
Y lleva siempre liguero
Silencioso y perverso me espía
por la ventana
Cuando más dispuesta estoy a
exorcizarme el anhelo
Se arrastra como reptil y llega
justo a mi cama
Colado entre mis sabanas y
enredado en mi pelo
Me dice en tono bajo –aquí estoy,
he vuelto…-
Entre apretadas caricias,
perturbadoras miradas y agitados besos
Sucumbe mi voluntad con boca de
fuego y cuerpo dispuesto
No vale decir NO, no sirve el
después, inútil petición, sin efecto el rezo
Aterrada me has dejado cual si
fuera la magdalena,
a punto de ser apedreada por los
señalamientos de mi conciencia
Recojo mi ropa esparcida, mi alma
estremecida y mi extraviada decencia…
Sin embargo si ahora volvieras,
te diría que no te fueras
Porque a pesar de que te llevas
todo me dejas siempre de ti llena
Viviría contigo fugitiva del
mundo, habitando entre fieras
Verdugo implacable que condenas mi
vida a esta placentera hoguera eterna
Julieta Parra
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